29.10.08

Choripán


Somos una familia tan imperfecta y equilibrada como un alfajorcito de maicena.
Nos encuentran los domingos o las noches entre semanas extrañas y cotidianas.
Una búsqueda de nuevos lugares, nuevos integrantes y sabores diferentes.
La total certeza de no pertenecernos pero si necesitarnos; no esencialmente, más bien en ruidos y olores.
Somos una familia disfuncional. Ya lo dijimos y es tan cierto como la milanesa.
Es genial vernos sabiendo que en esos momentos siempre existirá un lugar tan celeste como el cielo tapatío.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

a la mesa, con familia y chaaaaaabor. beso L

Anónimo dijo...

whatever!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

whatever!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

je ne comprend pas!!

Algeciras dijo...

jajaja