29.5.08

Sueño en bicicleta


Un grupo de gente haciendo ruido es un quilombo.
Un grupo de gente, en bicis, con lucecitas de colores, plagando la ciudad, con fuerza que genera luz, es una locura.
Me animé. De la mano de Mario, sus secuaces y Cleta, recorrí Guadalajara de noche y soñé con ella; o eso creí al acostarme; o eso creí al levantarme.

El recorrido empezó en el Tianguis de antigüedades (o más bien en los depas Telcel), siguió por Av. México, las vías, el puente peatonal de los cubos, Clouthier, Beethoven y hasta el Parque Metropolitano. Ahí adentro fue un sueño. Éramos un trineo de brillantinas rojas y blancas, cuidados por silbatos, y ruidos inventados.
La vuelta parecida, pero invadiendo terreno enemigo: Las rutas.

Fue una vuelta en bici, pero fue más.
El cuidado, la energía, la no luz y la luz. Las charlas, la ayuda, las miradas de espacios y paisajes que no recordaba porque seguro no existieron hasta ayer.
Quiero volver a esa vuelta, y no de bici, más bien de mi. El giro de una tarde, convertida en noche, después de agua con cloro y atardecer que quemaba el espejito del auto.

Mayo. Qué mess. La vuelta hubiera sido otra si no era mayo.

2 comentarios:

iris cielo dijo...

guau. cleta y julieta.- que equipo para esa experiencia en el mayo guadalajaresco. me encanta me encanta

juligut dijo...

ya iremos mamut!